Debido a la dificultad del circuito con gran cantidad de curvas, variantes en elevación y climáticas, el Nordschleife fue protagonista de algunas de las carreras más memorables en la historia del automovilismo, incluyendo al mítico GP de 1957 donde Fangio se coronó por quinta vez tras una remontada increíble sobre su Maserati 250F. Destaca la victoria de Carlos Reutemann en el GP de 1975 y José María “Pechito” López hace pocos días en la carrera del WTCC que lo colocó como el primer piloto desde 1983 en ganar una carrera por un Campeonato Mundial en el Nordschleife.