En el periodo del 500 F también se generó una versión más lujosa, llamada Lusso. Este se diferenciaba por nuevos acentos cromados en los bordes de las ventanas y la línea del techo, así como barras cromadas extra en las defensas. El interior se modernizó con un nuevo volante, nuevos paneles en las puertas, asientos reclinables, tapetes y una nueva consola plástica con un panel de instrumentos de diseño cuadrado, el que albergaba un velocímetro de 130 km/h.